domingo, 9 de septiembre de 2012


Características de la educación entre los mayas.

Siendo los mayas predominantes religiosos y girando sus actividades en torno de la agricultura, la educación tenia que estar impregnada de estas dos modalidades. Si se han establecido como fines esenciales de la vida entre los mayas, el servicio de la religión, a la familia y al pueblo, los objetivos de la educación se mueven en estas tres direcciones. Para la designación del nombre que debía llevar el niño, un sacerdote consultaba el horóscopo, la respuesta contenía además un pronóstico sobre la profesión que debía seguir el niño cuando creciera. Podemos entonces inferir que la educación en esos pueblos poseía la características siguientes: a) desarrollar paralelamente al adelanto de los instrumentos de producción y al acendrado espíritu religioso; b) era carácter mimética y tradicional; c) las actividades y destrezas se referían al cultivo del maíz y a los labores del hogar; d) existían diferencia entre la educación del hombre y de la mujer ; e) debido a que se iniciaba la etapa de la esclavitud y por consiguiente la división de las clases, se iniciaba también una educación para las clases dominantes , diferente de la que se practicaba entre el resto del pueblo. ( los esclavos eran por lo general rehenes de guerra).Educación asistemática dentro de la constelación familia No hay testimonio de que haya existido entre los mayas un sistema educativo. Sin embargo, su desarrollo científico y artístico nos hace suponer que tenía que existir una función conservadora e incrementadora de la cultura, y que esta función estaba sin duda en manos de la clase dominante y de manera particular en los sacerdotes. La educación entonces, hasta donde sabemos, tenía carácter asistemático, es decir que no obedecía a una planificación regida y supervisada por la clase dominante. Ya hemos dicho que entre las atribuciones de los sacerdotes estaba la observación de los astros y el cálculo del tiempo, de manera que era este un grupo social el encargado de custodiar los bienes de la cultura y llevar acabo las investigaciones de carácter científico. Para llevar este cometido a lo largo del tiempo, tendría que reparar convenientemente a sus descendientes, con el objeto de que pudieran sustituirlos al ser necesarios. Es indudable que la educación mimética se desarrollo en gran medida. En cuanto a los grandes sectores del pueblo maya, solamente recibían la educación que sedaba dentro del hogar, la cual comprendía en la preparación para el trabajo, la habitualidad y adiestramiento tradicional, la instrucción sobre ritos religiosos y las normas de respeto y cortesía. La educación dentro de la constelación familiar estaba influida por las necesidades vitales y la organización del trabajo, base de sus relaciones de producción. Las madres eran sumamente cariñosas con sus hijos, les hablaban en lenguaje infantil y muy remotamente les aplicaban castigos físicos.

El niño así se educa, mas que rodeada de temores” por su deseo de ajustarse a las prácticas sociales establecidas”.

Especiales características revestía entre los mayas la educación estética y la educación femenina. La educación de la mujer; la discriminación exagerada y la vergüenza hacia el varón era algo que tenían que aprender.

 

En el México precolombino la educación de niñas y niños era de índole religiosa. Los padres ofrecían a sus hijos en los templos –también llamados Telpochcalli en donde entraban tanto niñas como niños-- para que sirvieran a los dioses; o bien al Calmecac, en donde sólo asistían varones. En este lugar se enseñaban hábitos de limpieza y se les inculcaban valores como la humildad y la castidad. Cronistas de la época, como el padre jesuita Josep Acosta, escribieron acerca de las enseñanzas que allí recibían los infantes; “se les acostumbraba  a comer mal y dormir peor, con el propósito de familiarizarlos con la vida  de las campañas militares; además  de hacer penitencias, madrugaban y velaban, acostumbraban el baño con agua frías por la noche; también se les enseñaba a leer y aprendían de memorias las historias pintadas en los códices”. La historia es, sin duda uno de los caminos interesantes para conocer y comprender los sistemas educativos en el contexto indígena

Rojas Castro, Ovidia “La educación entre los aztecas”